El viernes 4 de diciembre tuvo lugar el tercer plenario de la iniciativa Planetary Wellbeing, un proyecto surgido a finales de 2017 de la mano del rector Jaume Casals y que pone de manifiesto la voluntad de la UPF de promover una acción transversal, multidisciplinaria e interdisciplinaria en este campo de actuación, con la finalidad de proporcionar a la institución una visión comprometida con los grandes retos de la sociedad global del siglo XXI; retos complejos, interrelacionados y sistémicos que afronta el bienestar humano, animal y del propio planeta.

Josep LLuís Martí, vicerrector para proyectos de innovación, y Josep María Antó, director científico de ISGlobal, responsables de la coordinación del proyecto, inauguraron la jornada. Ambos expusieron algunas de las conclusiones más importantes de la publicación en la que se encuentran trabajando, On the Planetary Wellbeing Strategic Framework. “El concepto de bienestar planetario trasciende las barreras de conceptos previos, como la salud planetaria” remarcaron. “No se trata solo de satisfacer las necesidades básicas, sino que se extiende al verdadero bienestar de todas las especies, conectando con los Objetivos de Desarrollo Sostenible”.

“No se trata solo de satisfacer las necesidades básicas, sino que se extiende al verdadero bienestar de todas las especies, conectando con los Objetivos de Desarrollo Sostenible”

El invitado principal del tercer plenario fue el economista francés Marc Fleurbaey, profesor en la Universidad de Princeton y en la Paris School of Economics. Especializado en economía del bienestar y economía normativa, Fleurbaey puso sobre la mesa tres retos de gran importancia que se plantean alrededor del concepto de bienestar planetario. En primer lugar, cuestionó el alcance real del término “bienestar planetario” y planteó que quizás a lo que se debería aspirar es a un progreso verde que permita no sólo mantener las condiciones medioambientales y de vida actuales, sino mejorarlas. Por otro lado, destacó la dificultad de algunas ciencias para tratar con acercamientos como este, que requieren de capacidad para realizar predicciones, y finalmente mencionó los cambios que están experimentando los referentes culturales en un avance hacia un panorama de interdependencia.

A pesar de estas tres reflexiones sobre la forma actual de entender del bienestar planetario, Fleurbaey hizo hincapié en que su sugerencia “no trata de descartar los marcos interpretativos que tenemos” sino de “mantener la mente abierta a un panorama más amplio, que siempre resulta ir más allá de lo que pensábamos”. Finalmente, remarcó que “existe un gran valor en los logros colectivos, más allá de la suma del bienestar individual. Cuando reconozcamos esta interdependencia cambiará realmente la manera en que entendemos y valoramos las cosas”.

Tras un pequeño debate sobre las ideas presentadas por Fleurbaey, el plenario concluyó con la exposición de los resultados de cuatro de los proyectos subvencionados en la primera  convocatoria de proyectos de investigación sobre Bienestar Planetario: “Forced migration and cognitive development during childhood”, a cargo de Miguel Burgaleta, investigador del grupo de investigación en Speech Acquisition and Perception; “Informative HR based guide about climate change communication”, a cargo de Ana García, del grupo de investigación en Derecho Internacional Público y Relaciones Internacionales;“Interactive Policy Explorer for Planetary Wellbeing”, a cargo de Mario Ceresa, investigador del grupo de investigación en Simulation, Imaging and Modelling for Biomedical Systems, y “Youth Global Engagement for Climate Action. The results of a pilot study of Fridays for Future-BCN” a cargo de Mariona Ferrer y Roger Soler i Martì, investigadores de  los departamentos de Ciencias Políticas y Sociales y  Comunicación, respectivamente.